Hay una vieja canción popular sobre un viajero sediento que se encuentra con una bomba en el desierto. Una nota adjunta explica que hay un recipiente de agua enterrado cerca para cebar la bomba. Tienes que dar antes de recibir, dice la nota. Depende del viajero decidir si beber el agua del frasco o arriesgarse a que la pequeña cantidad de agua invertida dé como resultado un suministro ilimitado de agua fría y clara. Así es con ir la milla extra. Tienes que dar antes de recibir. No puedes esperar recibir generosas recompensas y luego decidir qué dar a cambio. Debes dar libremente y tener fe en que las recompensas eventualmente vendrán. Como el clérigo Frank Crain dijo una vez: "Puedes ser engañado si confías demasiado, pero vivirás en un tormento si no confías lo suficiente".